Hace unas semanas me llegaba un mensaje de Javi que incluía un enlace a un libro y me decía que fuera echando un ojo... Solo con visitar ese enlace me llamó la atención la historia, vamos que podría decirse que me enganchó antes de empezar a leer.
Título: Reikiavik.
Autor: Pablo Sebastiá Tirado
Editorial: Reino de Cordelia
ISBN: 978-84-16968-59-6
Fecha de publicación: Noviembre 2018.
Sinopsis: Después de haber sido durante años los capos de la mafia en Barcelona, los Ferrutti, dueños de locales de juego clandestino, reyes del tráfico de drogas y de la trata de blancas, aparecen muertos en uno de sus antros. Hasta entonces parecían ejercer el control sobre toda la ciudad y tener a la policía a su servicio, pero Hannu se confirma como el mejor para eliminar escoria humana de la faz de la tierra y nunca deja un cabo suelto. Esta vez, sin embargo, una joven y su bebé se cruzan en su camino y en el de su fiel compañero, un rottweiler gigantesco de color azabache. Juntos deben huir del resto del clan de los Ferrutti y de una Barcelona corrupta y sumida en el odio… Pablo Sebastiá Tirado nos sumerge en los bajos fondos barceloneses, pero también nos lleva de viaje hasta Islandia, Sicilia e, incluso, al futuro…
Opinión personal: Nada más tener el libro entre mis manos lo primero que me llamó la atención fue su cuidado diseño exterior. La sobrecubierta del libro es la que ilustra estas líneas, pero la cubierta es aún más espectacular, un mapa de Islandia y sobre él un revólver...
Una novela llena de guiños, desde el principio hasta el fin, así los cuatro capítulos en los que se divide la historia tienen nombres de libros bíblicos, tres del antiguo testamento, Génesis, Levítico y Salmos, y el último con el que se cierra la Biblia, el Apocalipsis, no faltan las citas a estas libros, citas que, por otra parte, bien adentrada la novela entenderemos el por qué de su aparición. Pero la física también tiene su parte protagonista en la historia, saltos cuánticos, el famoso Gato de Schödinger, la psicología, el cine, la pintura...
Y sin embargo nada de todo esto es lo fundamental de una historia con dos protagonistas principales, el sicario albino Hannu y el enorme rottweiler azabache que siempre le acompaña. Una novela que comienza con el ajusticiamiento a sangre fría de los hermanos Ferrutti por parte de Hannu, un tipo sin sentimientos que curiosamente cae bien al lector desde el principio.
Junto a esta trama se desarrolla otra paralela, diez años antes, en una cárcel de máxima seguridad siciliana, donde un condenado por asesinato perteneciente a la mafia va a conseguir salir de la cárcel a cambio de someterse a unos experimentos científicos en Islandia que nadie sabe muy bien de que tratan.
Y así alternando capítulos en Barcelona y capítulos en Islandia se va dando forma y contenido a una estupenda historia en la que el lector, sin ninguna duda, se planteará dilemas éticos y morales que no tienen una fácil discusión.
Algunos se plantearán la historia como una mezcla de novela negra y ciencia ficción, pero yo creo que va un poquito más allá, no es posible separar una y otra, quizás no sea tanta ciencia ficción sino simplemente un adelantarse a los tiempos que vienen y es esto, creo, lo mejor que tiene la novela, que el autor consigue que la historia sea totalmente verosímil y creíble.
En definitiva un muy, muy buen libro, de lo mejor que he leído en este recién acabado 2018, con ritmo, suspense, buenos diálogos... Sobresaliente.
