Se puede tener mucho talento, se puede poner pasión en lo que uno hace, se puede ser perseverante..., pero no hay que dejar de fijarse en todos los detalles. La clave estaba frente a ella, era un detalle sumamente importante pero que en ocasiones, preocupados por otras cosas, pasamos por alto.
Lo encontré gracias a Álvaro que lo compartió en la página de Facebook del cole.