Mostrando entradas con la etiqueta gong ji-young. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta gong ji-young. Mostrar todas las entradas

miércoles, 12 de marzo de 2014

[Libros] Nuestros tiempos felices, Gong Ji-Young

Llegué a este libro a través de las ofertas Kindle Flash que diariamente lanza Amazon (0,94 euros) y la verdad es que tenía curiosidad porque había oído hablar muy bien de Gong Ji-young, una escritora surcoreana que por lo que cuentan ha vendido más de 20 millones de ejemplares en Asia. Pese a todo me daba algún reparo eso de que la consideren la Paulo Coelho de la literatura oriental y que incluso aparece en la portada del libro como marketing.

nuestros tiempos felicesTítulo: Nuestros tiempos felices.
Autora: Gong Ji-young.
Traductor: Lee Hyekyung.
ISBN: 978-8408122913
Editorial: La esfera de los libros.
Número de páginas: 384.
Fecha de publicación: Noviembre 2012.
Precio: 19,86 euros (tapa blanda), 9,02 euros (formato digital Kindle), 9,49 euros en formato epub.

Sinopsis: Iuyeong es una joven perteneciente a la alta sociedad coreana quien, indiferente ante el mundo e incapaz de entenderse con su familia, no encuentra sentido a la vida y, tras varios intentos fallidos de suicido, languidece entre el alcohol y la desesperanza. Sin embargo, su tía, la hermana Mónica, a la que siempre se ha sentido especialmente unida, ha decidido que su sobrina debe volver a disfrutar de la vida.

Para ello, la embarca en sus labores altruistas y juntas inician una serie de visitas al joven Iunsu, un condenado a muerte que sólo ansía que llegue el día de abandonar este mundo, sin esperanza alguna de redención. A pesar de sus dispares orígenes y la distancia entre sus vidas, Iuyeong y Iusun comparten una historia común de abusos físicos y psíquicos y, sin saber muy bien cómo, entre ellos surge una conexión que poco a poco les devuelve el deseo de vivir.

Pero el tiempo que les queda es muy corto, apenas unas horas a la semana, cada jueves, para recordar los tiempos felices que ambos conseguirán rescatar del olvido, el momento de la despedida y el aprendizaje del adiós. Aprenderán, también, que la libertad se encuentra, muchas veces, escondida en el fondo de nuestros corazones.

Considerada la Paulo Coelho de la literatura oriental y capaz de despertar auténticas pasiones entre sus seguidores coreanos, hasta el punto de hablarse del «síndrome Gong Ji-young», Gong consigue crear unos personajes rotundos y cercanos a un tiempo y una historia de amor y redención que funciona como un mensaje de esperanza al final de un oscuro túnel.

Nuestros tiempos felices es un libro muy directo que pretende hacernos llegar un mensaje muy positivo, y es que todos, incluso en las peores circunstancias, necesitamos del amor y la comunicación.

Dos personajes, un preso y una joven de la alta sociedad, que en principio nada tienen en común van a entablar una estrecha relación a través de las visitas que el preso recibe cada jueves en la cárcel. Lo que en principio es la indiferencia más absoluta termina convirtiéndose en una relación realmente intensa en la que la comunicación fluye sin cesar.

Aunque Gong ha declarado que no era su intención escribir un alegato contra la pena de muerte, lo cierto es que la dureza de los personajes, la descripción real de la situación de los presos y la forma en la que introdujo a los coreanos en un mundo que desconocían hizo que la obra se convirtiera en un símbolo para los opositores de la pena capital. El libro se publicó en Corea del Sur en 2004 y dos años después fue llevado al cine. Desde el año 2009 no se ha dictado ninguna sentencia a muerte en Corea lo que mucha gente atribuye al impacto tan brutal que tuvo el libro en la sociedad surcoreana.

Una de las cosas que más me ha llamado la atención del libro es la profunda religiosidad que subyace a lo largo de toda la historia y que refleja bien a las claras la profunda fe católica de Gong Ji-young.

Un buen libro, y aunque quizás esperaba algo más cercano a los estilos tan orientales de Murakami o Yoko Ogawa, no puedo decir que me haya defraudado en absoluto. Recomendable.