Me encantaron las historias de Harry Potter, después, cuando J.K. Rowling se arriesgó publicando Una vacante imprevista disfruté con su lectura así que cuando ahora, bajo el seudónimo de Robert Galbraith, la escritora británica hacía su primera incursión en la novela negra había que ver lo que nos iba a deparar la historia.
Título: El canto del cuco.
Título original: The Cuckoo's calling.
Autor: Robert Galbraith (seudónimo de J.K. Rowling)
Traductor: Jesús de la Torre Olid.
ISBN: 978-8467040395
Editorial: Espasa.
Número de páginas: 544.
Fecha de publicación: Noviembre 2013
Precio: 18,90 euros (tapa blanda), 12,34 euros (formato digital Kindle), 12,99 euros en formato epub.
Sinopsis: Una joven modelo con problemas emocionales cae desde su balcón de Mayfair en plena noche. Su cuerpo yace en la calle nevada. Todo el mundo asume que ha sido un suicidio, excepto su hermano, que contrata los servicios del investigador privado Cormoran Strike para que se encargue del caso. Veterano de guerra con secuelas físicas y psicológicas, la vida de Strike es un desastre. El encargo le da cierto respiro económico, pero cuanto más profundiza en el complejo mundo de la modelo, más oscuro parece todo y más se acerca Strike a un gran peligro. Un elegante misterio impregnado de la atmósfera de Londres, desde las calles más selectas de Mayfair hasta los pubs ocultos del East End o el bullicio del Soho.
El canto del cuco es una novela policiaca que, al igual que ocurría con Una vacante imprevista, tiene bajo el trasfondo de la historia una crítica social bastante fuerte. En este caso no se ceba en unos personajes de clase media o baja, sino que pone el foco en unos cuantos famosos. Personajes un tanto desagradables, decadentes y posiblemente sobrepasados por la fama y el éxito social. Carne de paparazzis y que sólo esconden drama bajo una fina fachada pero también críticas a la sociedad que idolatra a este famoseo y a los medios de comunicación que viven de airear sus miserias.
Pero aunque esto es lo que subyace en la narración la historia va más allá. Con dos protagonistas que en algún caso recuerdan a Holmes y Watson o a Poirot y Hastings, el detective Cormoran Strike y su eficiente secretaria Robin, la autora construye una sólida historia en la que lo importante no son las relaciones que se establecen entre los personajes sino fundamentalmente la investigación criminal que llevan a cabo.
Este es un género que me gusta mucho y creo que para los autores de este tipo de obras tiene que ser muy difícil mantener la tensión durante toda la historia y luego llegar a un desenlace lo suficientemente convincente. Rowling o Galbraith, que para el caso es lo mismo, consiguen hacerlo y aunque el final es un tanto tramposo por el giro que da la historia resulta bastante convincente.
Si tuviera que poner pegas, creo que aunque la autora ata muy bien todos los cabos algún personaje queda un poco desangelado y seguramente no se le saca todo lo que llevaba dentro, como puede ser el caso del novio de la modelo.
Una nueva apuesta la de Rowling, superada con éxito. Posiblemente algo forzada la idea de utilizar un seudónimo que más tarde o más temprano iba a destaparse para aprovechar el nombre de quien estaba detrás, pero que ya no era tan arriesgado como cuando se publicó la anterior novela, puesto que la autora podía haber seguido utilizando el filón de las historias infantil-juveniles al estilo de Harry Potter.
Una duda me queda y es si no habrá secuelas de esta historia, puesto que los protagonistas dan para ello. Veremos lo que depara el futuro.
[…] agradablemente su primera incursión bajo el seudónimo de Robert Galbraith en la novela negra, con El canto del cuco. Intuía entonces que habría secuelas de ese libro y El gusano de seda vino a darme la […]
ResponderEliminar