lunes, 4 de diciembre de 2017

Ironías y libros de texto

Han sido varias las ocasiones (1, 2, 3, 4, 5...), en las que he hablado de libros de texto en este blog. Y no he escondido mi opinión al respecto, no me gustan. Veo en los libros de texto más un negocio que otra cosa. Un negocio para las editoriales, un negocio para el comercio por Internet, y me refiero específicamente a Amazon (no hay datos públicos al respecto pero estoy convencido de que un muy buen porcentaje de sus beneficios vienen por este camino), un negocio también para muchos colegios concertados y privados que bordeando los límites de lo ético, que no de lo legal, se dedican a actuar como libreros cuando empieza el curso.

Lo he dicho ya en alguna ocasión pero me parece muy, muy triste que nada más empezar el curso el propio profesor diga a sus alumnos que el libro de texto que les han obligado a comprar no le gusta, y que por tanto no lo va a seguir, y así les da material fotocopiable de otras editoriales, o problemas que descarga de Internet porque con un criterio perfectamente respetable le parecen mejores, más interesantes o más didácticos. Igual de triste me parece que los alumnos te lleguen y te digan que su profesor no sigue el libro, que simplemente lo utiliza para señalarles los problemas que tienen que hacer como tarea. Es más habitual de lo que ustedes, amables lectores, pueden creer, y si no hagan la prueba y pregunten a hijos y conocidos.

Se que hay muchos profesores que siguen este blog, algunos no estarán de acuerdo con lo que estoy diciendo y seguro que tienen su parte de razón, estoy generalizando, pero como digo esta denuncia que hago aquí es algo muy habitual. Pero también hay algunos profesores que me han reconocido directamente que ellos no quieren tal o cual libro de texto pero desde la dirección o el departamento correspondiente "se lo imponen", no creo necesario aclarar el tipo de intereses a los que son debidas estas decisiones.

Un libro de texto pasa, o debería pasar, muchas revisiones antes de ser enviado a imprenta, las ambigüedades no deberían existir en estos manuales que entiendo han tenido que ser revisados por expertos. O quizás no. Supongo que me estoy haciendo mayor y por eso los libros de texto, los que utilizan mis alumnos, o los de mis hijas sin ir más lejos, me parecen malos de solemnidad. La imagen que aquí dejo es solo un ejemplo de un libro de lengua de tercero de primaria de la editorial SM.

IMG_20171203_205549.jpg

Amables lectores les invito a que intenten resolver el ejercicio 5. ¿Qué sustantivo sobra en cada fila?

A mí, en la primera fila se me ocurre que podría sobrar guirnalda, porque es el único de los sustantivo con un número impar de letras. Aunque también podría ser estrella que es la única que empieza por vocal. ¿Y si es polvorones que es la única masculina?

En la segunda fila se me ocurre que el sustantivo erróneo es uvas porque es el único de todos ellos que empieza por vocal, aunque claro ¿quién me dice que no es roscón que es la única palabra con tilde?.

En la tercera fila yo apostaría por rey, es la única que lleva la i griega o ye, no sólo en la fila sino en todo el ejercicio, pero lo cierto es que dudo, porque podría ser lazo como única palabra llana del grupo. Aunque finalmente me quedaría con rey, porque es la única carta de la baraja española que figura en la lista.

Por cierto, no hago nunca los deberes de mis hijas, pero si me piden ayuda intento ofrecérsela, en este caso le he dicho lo que he escrito más arriba pero también le he ofrecido otras respuestas, ella es la que he decidido con cual se quedaba :D

En fin, lo tomaré con ironía y sentido del humor... No queda otra.

 

6 comentarios:

  1. Como profe estoy de acuerdo contigo: los libros (de texto) son malos de narices, y la mitad de las veces (al menos los que yo he inspeccionado para decidir cual se iba a usar para mi asignatura: en mi centro eso se vota en claustro porque usamos libros digitales y hay que comprarlos todos de la misma editorial) ni siquiera siguen el currículo oficial ni las indicaciones de la autoridad competente (aquí en Cataluña, donde estamos trabajando ya por competencias, los libros se lo saltan alegre e impunemente).

    Pero el ejercicio este que dices es precisamente de los buenos. No es lo que parece, un ejercicio de vocabulario, sino un ejercicio de expresión: no hay respuesta correcta, lo que se valora ez la capacidad de razonamiento del alumnado.

    Está claro que el profesor debiera haberlo aclarado en clase al ponerlo (o hacer el primero del libro de modo oral, para que los alumnos vieran como se resolvía), pero quizás haya querido ver como se enfrentaban sus alumnos al desconcierto...

    También está la posibilidad de que sea un mal profe y, pese a usar libro de texto, no se haya leído las orientaciones pedagógicas, con lo que no sabrá lo que se pide en realidad y dará por buena una sola respuesta. De todo hay en la viña del señor!

    ResponderEliminar
  2. Lo primero de todo agradecerte, Roser, tu comentario.

    Podría admitir que es un ejercicio bueno, en el sentido de ser un ejercicio abierto, un ejercicio de expresión en el que cualquier respuesta, siempre que esté justificada, puede ser correcta. De hecho esta misma mañana planteaba el problema a una sobrina que cursa 2º de ESO y ella me daba otras respuestas totalmente diferentes a las que yo proponía, la piña en la primera porque no lo relacionaba con la Navidad, las luces en el segundo porque era lo que no se puede comer (me explicaba que las bolas eran de chocolate), el mazapán en la tercera porque era lo que se puede comer... A mí me valen esas respuestas.

    Mi hija mayor cuando estaba en quinto o sexto de primaria me decía que los ejercicios de matemáticas de su libro eran muy aburridos, si estaban dando el tema del mínimo común múltiplo todos los ejercicios eran de eso, si daban divisiones todos eran de hacer divisiones, y ahí es donde yo creo que radica buena parte del problema. Los niños no son tontos y se dan cuenta cómo son los libros, cómo están estructurados, y si en el tema este en concreto han estado viendo el número (singular-plural) de los sustantivos el ejercicio deja de ser abierto para convertirse en otra cosa. ¿Qué dice además el solucionario del libro en este caso?

    Hace tiempo publiqué este artículo en el blog, y creo que viene muy al hilo de todo esto: https://30dediferencia.com/2013/03/02/lo-esencial-es-invisible-a-los-ojos/

    ResponderEliminar
  3. Querido José Luis,
    Sigo tu blog porque creo que me gusta bastante como piensas. Me ha encantado releer el apunte que me citas en tu respuesta.
    Como te decía, está la posibilidad de que el profe de tu hija sea un mal profesor, pero eso no se resuelve cambiando el libro ^_^

    También te decía que no me gustan los libros de texto. En el centro donde trabajo (público) el libro es digital y lo usamos solo porque hay profesores que no saben separarse de él. El resto, ya que lo tenemos, lo usamos para complementar o ejemplificar los proyectos que diseñamos; este trimestre, en 3o ESO, catalán y castellano hemos convertido a nuestros alumnos en periodistas para que redactaran un periódico que incluyera los diferentes tipos de texto; hemos usado el libro para que los alumnos analizaran de manera guiada y autocorrectiva diferentes artículos, y para que resolvieran sus dudas ortográficas. Paralelamente, tecno, sociales y física se han "casado" para reabrir el caso de Copérnico (en el libro los alumnos han encontrado desde ilustraciones para comprender su época hasta modelos de los aparatos que él usó).

    ResponderEliminar
  4. Una pena desde luego
    Mi respuesta al ejercicio 5 podría ser q estén en singular o en plural, en cada fila hay uno q no es como los demás.
    Menos mal q ya pasé esa etapa de mis hijos.
    Ánimo y a tomárselo con humor, porque de otra manera, no solucionamos nada😜
    Abrazotes

    ResponderEliminar
  5. Roser, ese es uno de los grandes problemas, los docentes que no saben trabajar sin un libro de texto al lado. Me parece que es una herramienta útil, pero de ahí a fiarlo todo a ese libro de texto va un abismo.

    Me gusta vuestra forma de trabajar, lo de crear un periódico reporta mucho más a los alumnos que leer en qué consiste en el libro de texto, estoy seguro de que habrán aprendido mucho más. Mi hija pequeña este año en la asignatura de ciencias naturales está encantada con su profesora porque les llevó al jardín, les ha traído hojas de árboles de todas las formas que aparecen en el libro (lobuladas, acorazonadas, con dientes de sierra...) verlo y tocarlo les aporta mucho más que leerlo en un libro de texto.

    Marisa, yo creo que Roser tiene buena parte de razón, el ejercicio en sí no es malo, de hecho cuando lo corrigieron cada uno se fue por un camino (la mayoría por el tema navideño puesto que el tema con que comenzaba el libro era ese, otros por la respuesta que tú has dado, porque en el tema se hablaba del género y número de los sustantivos...) pero lo importantees que la profesora daba por buenas todas las opciones (en esto habrá que convenir con Roser que es una buena profesora porque no se ha cerrado a una única posibilidad), el problema cuando se usan tanto los libros de texto es que los niños terminan pensando que la solución es única... No os imagináis los problemas que tengo con alumnos de 2º bachillerato cuando en matemáticas les toca utiliza un teorema para demostrar únicamente que existe solución a un problema (no en decir cuál es) y ellos se empeñan en encontrarla porque desde bien pequeños se les ha transmitido esa idea.

    Gracias a las dos por vuestros comentarios.

    ResponderEliminar
  6. […] que me molesta, y mucho, (no solo al bolsillo) que muchos alumnos de secundaria tengan sus libros pero “no los usen”, porque al profesor no le gusta, porque solo sirven para señalar los ejercicios que hay que hacer, […]

    ResponderEliminar