martes, 5 de mayo de 2020

Club de lectura virtual (II) - Aventureros entre libros


Hace un par de semanas publicaba una entrada aquí en el blog hablando de la puesta en marcha de un club de lectura virtual para niños.









Y terminaba esa entrada anunciando que el segundo libro que íbamos a leer era La isla del tesoro, de Robert Louis Stevenson. Tengo que reconocer que es uno de mis libros preferidos, no sé cuántas veces lo habré leído, de chavalillo por lo menos media docena de veces... Y además creo que cada vez que uno lo lee encuentra detalles nuevos en la historia.





No iba a ser una lectura fácil, recuerdo que los chavales andan por los 10-11 años (5º Primaria), y entiendo que no están acostumbrados a este tipo de lecturas. Para alguno de ellos habrá sido probablemente uno de los libros más 'largos' que hasta ahora se hayan leído. El lenguaje no es que sea difícil pero estaba completamente seguro de que muchas palabras eran totalmente nuevas para ellos. Ciertamente la lectura en dispositivos electrónicos, ya sean tabletas o lectores electrónicos, permite solventar esto con una simple pulsación sobre la pantalla, pero contaba con que a alguno de ellos las dificultades les podían invitar a abandonar la lectura desde las primeras páginas.





Como en la ocasión anterior había un par de semanas para leer el libro. En la reunión intermedia les propuse que por grupos se documentaran sobre la vida del autor, sobre cómo se había escrito la novela y que nos hablaran de los personajes, también les invite a que el que quisiera escribiera un final alternativo del libro, distinto en definitiva del original. Es una forma de que durante la semana tengan que 'juntarse' virtualmente (y ciertamente no se apañan mal) para preparar la actividad.

En esta ocasión han sido menos los que se han terminado el libro, alguno abandonó al poco de empezar, otros se leyeron solo unas pocas páginas, pero también los ha habido que se lo han terminado y además han disfrutado, que al final es lo más importante, con las aventuras de Jim y John Silver. Una de las actividades que hacemos en la reunión en la que ponen un poco en común lo que les ha parecido la historia es dar una puntuación al libro. Yo les digo que no pasa nada si no les ha gustado y le dan una nota baja, pero me sorprendió (y me agradó) ver que la nota media de La isla del tesoro ha sido 8,2.





Como siempre al terminar elegimos el siguiente libro para el club, en este caso se trata de Cuando Hitler robó el conejo rosa, de Judith Kerr. Había alguna opción más pero al final esta fue la elegida. En mi opinión se trata de un libro de 'más fácil lectura', es más corto y el lenguaje les puede resultar más cercano. Es una historia con mucho fondo, un título con mucha metáfora, y tengo mucha curiosidad por ver qué me cuentan. Por cierto que en la siguiente reunión debíamos elegir nombre para el club. Y como esa reunión ya se ha celebrado y lo hemos elegido os anuncio que nuestro club ya tiene nombre: Aventureros entre libros.





Aquí os dejo un enlace con la opinión de Carla y su final alternativo. Si llega alguna más la iré incluyendo aquí.


miércoles, 29 de abril de 2020

Inmunidad de grupo y vuelta al cole


Creo que los expertos sanitarios deben dar su opinión, guste o no guste, independientemente de ideologías políticas, tienen que decir lo que dicta la ciencia. Y también creo que los políticos deben escucharlos, tener en cuenta sus apreciaciones y luego tomar decisiones en consecuencia. Decisiones que puede que no coincidan con todo lo que dicen los expertos, pero que deben tener en cuenta lo que les han dicho.





No sirve que los políticos se escuden en "lo dicen los técnicos, lo dicen los expertos". Si se hiciera todo lo que dicen los expertos no necesitaríamos para nada a los políticos y nos los podríamos ahorrar (que, por cierto, quizás no fuera mala cosa). De un político esperamos que gestione, que tome decisiones.





Viene todo esto al hilo de que acabo de leer unas declaraciones de un pediatra, Fernando García-Sala, presidente de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria, en las que dice que 'los menores no deberían volver al colegio hasta que no se consiga una “inmunidad de grupo”, con más del 60 % de la población inmune a la COVID-19'. Y habla de septiembre/octubre como fecha de vuelta al cole...

Leo otro artículo en el que según un estudio de la Universidad de Harvard (14 de abril de 2020) la inmunidad de grupo no se alcanzará hasta julio... de 2022. ¡¡2022!!





Escuchaba a un doctor decir que ahora que se están empezando a realizar pruebas a sanitarios el número de positivos entre ellos ronda el 20%. Con lo que se puede suponer que como máximo debe andar por ahí el número de personas que han/hemos sido contagiadas y gozarían/gozaríamos de una posible inmunidad (porque tampoco parece que sea algo que esté demasiado claro).





No soy para nada experto, ni epidemiólogo ni nada que se le parezca, pero a mí esos datos se me quedan muy, muy cortos para pensar que en septiembre/octubre se pueda hablar de inmunidad de grupo, pero evidentemente no voy a llevar la contraria a los expertos (aunque ellos mismos no se pongan de acuerdo). Sí que quiero poner el acento en que lo de la vuelta al cole lo vemos hoy, a finales de abril, como algo muy, muy lejano, pero no estaría de más ir pensando en ello, que luego a este gobierno le pasa como con todas las cosas, que se hacen deprisa y sin pensarlas bien, y hay que cambiarlas y rectificarlas.






Fases y desfases


¡Qué nadie se preocupe! Lo he dicho ya en varias ocasiones, es necesario que haya tranquilidad, mucha tranquilidad, de lo que ayer tarde tras el consejo de ministros dijo Sánchez a lo que se nos dirá el sábado tras las pertinentes rectificaciones y por supuesto la medalla en la solapa que se pondrá Iglesias antes de pasar a la siguiente fase, mediará un abismo.





Según lee uno un periódico u otro resulta que no está del todo claro si se puede salir a hacer deporte el día 2 como nos dijo el presidente el fin de semana pasado o se podrá hacer el día 4 que es cuando empieza la fase 0.





Esto es una opinión muy subjetiva, pero la falta de credibilidad del gobierno crece día a día. También lo he comentado otras veces, rectificar es de sabios... y de Sánchez. Demasiadas incertidumbres, demasiado caos..., y es verdad que nunca nos habíamos enfrentado a una situación como esta, pero es que hoy uno dice A y mañana el otro dice B, así que yo hasta que no salga Iglesias diciendo C no me creo nada.





De las fases no voy a hablar, creo que en la tercera nos encontraremos todos (chiste malo), pero lo que es casi seguro es que antes de que las entendamos del todo ya habremos salido de esta. Eso sí, si yo fuera directivo de una televisión iba creando un "Master President", todos los domingos en prime-time un programa nuevo, con un formato en el que los telespectadores pudieran votar online, tipo Eurovisión, dando puntos a las provincias amigas... "Toledo güan poin que había mucha gente en Zocodover sin guardar la distancia de seguridad, Cádiz chu poins, mucha gente en las terrazas tomándose sus cervecitas... Cáceres tuel poins, que los cacereños han cumplido con todas las medidas". Y al final del todo, salen Sánchez o Illa y dicen Barcelona no pase a la fase I, Guipuzcoa pase a la fase II, Madrid se queda en la fase 0... Éxito asegurado y nosotros entretenidos. ¿Qué más quieren?


viernes, 24 de abril de 2020

La importancia de tener unos datos verdaderos


Desde el principio de toda esta crisis sanitaria he venido diciendo que me parecía muy importante, fundamental, el disponer de unos datos fiables. Y datos fiables significa que además de que no se escondan números, era necesario (impresdindible) que todas las comunidades autónomas siguieran los mismos criterios a la hora de contabilizar contagiados, fallecidos... No se hizo al principio y no se está haciendo ahora.





Las comunidades autónomas, a pesar de la existencia de un mando único, han seguido sus propias directrices, cuando se empezó a sospechar que el número de fallecidos era mayor que el que nos estaban contando en las ruedas de prensa se ponían excusas más o menos aceptables. Después Cataluña decidió reconocer que el número de fallecidos era bastante mayor y así lo incluía en sus propios informes, aunque nunca se llegaron a contabilizar por Sanidad. Después la Comunidad de Madrid siguió los pasos de Cataluña y reconoció a los fallecidos en residencias y domicilios con lo que el número se disparaba, pero Sanidad seguía, y de hecho hoy sigue, sin incluirlos en sus números.





Distintos expertos y universidades han trabajado con modelos matemáticos con los que intentar ayudar en el control de la pandemia, pero algunos lo tuvieron que dejar cuando vieron que los datos que se estaban ofreciendo no eran validos, o se cambian los criterios con lo que las series dejaban de tener sentido. Aunque llevamos un par de semanas o más escuchando que se ha llegado al pico, que comenzaba a controlarse la situación, lo cierto es que cada día se repetía el mantra y los números, los fríos números a algunos no nos decían eso. El día 13 de abril publicaba en el diario una estimación del número de fallecidos para finales de este mes, 23.000 decía yo, y evidentemente me quedé corto, probablemente para entonces estemos en los 25.000. ¿Por qué me pasó esto?, pues porque contrariamente a lo que nos decían no habíamos tocado techo aunque se nos siguiera intentando engañar diciendo que se había superado el pico.





Hoy mismo desde Sanidad se nos ha vendido que por primera vez el número de curados es mayor que el número de nuevos diagnosticados. Una buena noticia sin ninguna duda. El problema es que si uno se va a los datos de hace unos días se encuentra con que Sanidad, por arte de magia, ha hecho desaparecer más de 11.000 positivos. Y además de los nuevos diagnosticados resulta que no se cuentan todos ¿?, el ministro Illa ha dicho por enésima vez que 'esta vez si estamos doblegando la curva'. Según El Mundo, hoy habría 5.229 nuevos casos (el peor dato de las últimas semanas), aunque no tiene porque ser malo en sí, ya que podemos asumir que se están realizando más test que en días anteriores.





Ya está bien de cambios, manipulaciones, datos que se esconden o eliminan... La estructura de los datos no puede cambiar de un día para otro y desde el ministerio de Sanidad se ha hecho ya varias veces. El ministro Pedro Duque ha dicho: 'No teníamos un plan de qué hacer en una pandemia. Ahora ya lo sabemos: lo que hay que hacer es poner muchísima más gente a recabar datos y recopilarlos'. Tiene razón, nos tendría que servir para la próxima pandemia, pero también para esta.


miércoles, 22 de abril de 2020

El árbol que no dejaba ver el bosque


Lee uno un titular de la Agencia EFE tal que este:






https://twitter.com/EFEnoticias/status/1252896221167042560




Y lo primero que piensa es ¿dónde estamos llegando?, ¿será también culpa del estado de alerta? Evidentemente estos jueces deben estar locos, porque intentar frenar un desahucio no parece que constituya un delito.

Lee después el tuit de uno de los muchos vicepresidentes que se gasta este gobierno y ya le queda casi perfectamente claro:






https://twitter.com/PabloIglesias/status/1252907709655113728




"Se condena a quien protestó por un desahucio vergonzoso". Ya uno supone que la cosa debe ser seria e incluso puede haber un conflicto entre poder judicial y legislativo. Y me reafirmo, estos jueces además de locos deben ser unos sinvergüenzas.






https://twitter.com/pnique/status/1252905089955770368




¡¡Y además lo han hecho sin pruebas!! Eso por lo menos debe ser prevaricación.





Voy a leer la noticia completa, la de la Agencia EFE, que parece una fuente seria y fiable, poque me parece muy fuerte lo que ha pasado. Empieza así:





El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha condenado a un año y siete meses de prisión a la diputada de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid Isa Serra por los delitos de atentado a la autoridad, lesiones leves y daños a raíz del intento de frenar un desahucio en el barrio de Lavapiés en 2014.





¡Coñe! que ahora dice que la condena no es por frenar un desahucio, sino por atentado a la autoridad, lesiones leves y daños a raíz del intento de frenar un desahucio. No parece lo mismo que estaba leyendo hace un momento.





Esto es como si ayudo a un viejecito a cruzar la calle y mientras lo hago, le robo la cartera y luego llega un medio y publica que me han condenado por ayudar a un viejecito a cruzar la calle. Aquí el problema es que muchos se quedan sólo en lo que dicen unos, los suyos, o en el titular de la noticia, el árbol que no deja ver el bosque, en definitiva.


Improvisaciones y tranquilidad


Estos últimos días estamos sufriendo un 'chute' de improvisaciones y rectificaciones que no ofrece (ninguna) tranquilidad a la sociedad. Llevábamos semanas escuchando que están estudiando las medidas de 'desescalada', pero claro cuando luego salen y explican, o mejor dicho, intentan explicar alguna de estas medidas, el resultado es que nos quedamos peor de como estábamos.





El último ejemplo fue ayer con el tema de los paseos de los niños. Es verdad que el gobierno por una vez consiguió poner a todo el mundo de acuerdo, pero de acuerdo en que lo habían hecho mal. Si hasta los socios del gobierno salieron diciéndolo... Curioso como algunos intentaban a media tarde justificar con las razones más peregrinas lo que a todas luces no tenía justificación, pero es lo que sucede con los que ponen por delante del sentido común la ideología.





Creo que a nadie se le escapa que las últimas semanas de confinamiento van a ser las más complicadas. Si además las medidas que se tomen salen mal, cosa que puede suceder, las tortas que le van a caer al gobierno van a ser de órdago. Por eso es imprescindible ser tremendamente claro, explicar con detalle las decisiones, mostrar los informes de los expertos en los que se basan, y también por supuesto no tomar una decisión y rectificarla seis horas después. Es una opinión mía, pero creo que toda la culpa del jaleo la tiene Pedro Sánchez, que el sábado, en su homilía de las tres, salió poniendo fecha a la salida de los niños, podría ser que después los expertos le dijeran que cuidado, que a lo mejor todavía era demasiado pronto y había riesgo, y se vieron en la obligación de recular. A mí me gustaría escuchar hoy las explicaciones de los expertos que hayan aconsejado o desaconsejado estas medidas, las de los políticos es que ya no me las creo. Se dedican a lanzar bulos y posiblemente ya estén siendo investigados por la Guardia Civil. ;)





Merece la pena leer esté artículo de Fernando Garea y Juanma Romero porque aporta luces a lo que ayer sucedió.





Que nadie se preocupe que de aquí a que todo esto se publique en el BOE nos podemos encontrar con que la RAE tiene que buscar un hueco para añadir una acepción nueva a la palabra 'paseo'.






martes, 21 de abril de 2020

Instrucciones para final de curso en la Comunidad de Madrid


Finalmente se ha hecho publica la resolución con las instrucciones para el desarrollo del tercer trimestre y final del curso 2019-2020 en la Comunidad de Madrid como consecuencia del estado de alarma provocado por la COVID-19.





En este enlace se puede acceder a estas instrucciones que básicamente ni dicen, ni aclaran absolutamente nada. El documento siendo suave es poco concreto, no especifica que ocurre con 4º Eso, 2º Bachillerato o Formación Profesional. Vamos que no dice nada nuevo.





¿Resumen? Pues nada de nada, que los profes hagan lo que buenamente puedan, que lo lleven del mejor modo posible y que ¡paciencia para todos! Por si alguien se iba a creer que el único que gestiona mal las crisis es el gobierno central, que le quede claro que los autonómicos no le andan a la zaga.