Libros de segundaria ¿?

Gratis, lo que se dice gratis, no van a ser, porque el dinero que cuestan de algún sitio tendrá que salir. En el cole nos enseñaban eso de que la energía ni se crea ni se destruye, simplemente se transforma, así que los pagaremos con nuestros impuestos, pero no es eso de lo que quiero hablar hoy.

Lo que de verdad sería importante es que los libros sirvieran, fueran útiles, e hicieran que los periodistas escribieran correctamente, esta imagen que aquí pongo lleva en portada de uno de los diarios más importantes de España desde ayer, y así sigue...

 

Ya hay campeón de liga

Este fin de semana publicaba artículo en el Semanario Más hablando del final de liga, y así, como quién no quiere la cosa, mezclaba fútbol y política. Vamos a darle una vuelta más de tuerca y ahora ya nos ponemos y hacemos la crónica taurina de la jornada...

Menudo revolcón, en el sentido taurino del término, se ha llevado esta tarde Susana, estoy convencido de que nunca pensó que podría sucederle, quería hacer una gran faena, pensaba que tenía al público de su lado y por eso brindó al respetable, olía a faena grande, y se fue a los medios, citó desde más allá  del tercio y el morlaco le vino cruzado. Era la tarde de su confirmación de alternativa y defraudó.

En el tendido de sombra tenía a los más fieles, los cuadros de su partido, barones y gente noble, pero los del siete, la gente de sol no le perdona que toree con el pico de la muleta, mucha mano derecha pero poco toreo al natural, y que en un partido de izquierdas el torero no se lleve la franela a la izquierda no está bien visto. Adornos y mas adornos, algún molinete lucido y de vez en cuando un pase de pecho ajustado, pero como se suele decir mucho ruido y pocas nueces.

Susana está demasiado acostumbrada a las ganaderías de las figuras, torito recortado, noblote y soso. Hoy tocaba hacer faena de lidiadora, empezar doblándose por abajo, haciendo humillar al astado, suavizando la embestida, cargando la suerte, y Susana no sabe hacerlo, le venía grande. Pensaba que era el mismo toro de siempre, ese de las plazas de segunda o de tercera en los pueblos y por eso cuando tras terminar el derechazo el toro se le revolvía y buscaba las zapatillas Susana estaba siempre fuera de cacho, podía haber probado a llevarse la muleta a la izquierda pero nunca se ha sentido cómoda toreando al natural.

Es lo que pasa cuando se apuesta por hacer una faena de aliño y el respetable, ese que ha pagado su localidad, está harto de florituras. Pitos y palmas de tango, murmullos de desaprobación y runrún en el tendido. Susana no se ha acoplado en toda la campaña de las primarias, la temporada se le estaba haciendo larga, hoy tocaba salir por la puerta grande pero al final ha salido entre las almohadillas y la bronca del respetable. Sonaban los avisos y todavía no se había ido a por la espada de verdad, y con los aceros tampoco estuvo fina, metisaca a la primera, pinchazo en los bajos a la segunda, feo bajonazo a la tercera y el morlaco que se amorcilla y Susana tampoco acierta con el verduguillo. Tercer aviso y le devuelven el toro a los corrales. No podía haber tenido peor pesadilla, pero así fueron las cosas y así se las hemos contado.

Nota local para Aranjuez: Ya se lo decía yo a Susana, que tuviera cuidado, si Cristina y los suyos la apoyaban aquí en Aranjuez lo iba a tener muy crudo, mi propuesta para Cristina es que en las próximas elecciones pida el voto para Mariano, así seguro que le hunde definitivamente. Pero bueno ahora ya seguro que Cristina sí es de Pedro, igual que lo ha sido siempre. O no.

Por cierto que dejando ya los toros a un lado es curioso que todos los líderes políticos han ido felicitando a Pedro Sánchez, Mariano Rajoy también lo ha hecho...

Felicito al @realmadrid y a toda la afición madridista por la 33ª Liga. Un título deseado y merecido. Magnífica temporada. MR

— Mariano Rajoy Brey (@marianorajoy) 21 de mayo de 2017

Con Rajoy ya sabemos que hay que leer entre líneas, yo me voy a poner a ello. :)

[Cultura] Desconta2, por 100% de cuento

Este pasado jueves, dentro de la II Semana de la Narración Oral de Aranjuez, tuvo lugar un cuentacuentos para adultos, en el que la gente de 100% de cuento nos descontaron cuentos tradicionales, dando la vuelta a relatos tradicionales como si de un calcetín se tratase.



Cuentos tradicionales que todos hemos escuchado en alguna ocasión, y que de la mano de Roald Dahl y sus Cuentos en verso para niños perversos, nos mostraban otro estilo, otro final, una Cenicienta menos dulce, unos príncipes no tan guays, un lobo no tan malo...

Y así, gracias a 100% de cuento, se nos pasó una hora divertida, llena de humor, risas y sonrisas.

Y como los peques también tenían que tener su lugar en esta II Semana de la Narrración Oral de Aranjuez esta mañana en la Biblioteca Infantil y Juvenil Álvarez de Quindós, la narradora y escritora Paula Carbonell hacía disfrutar a los más pequeños con algunos cuentos tradicionales y otros menos conocidos, con un estilo cercano y ameno. Una forma inmejorable de acercar a los libros y la lectura a los niños y no tan niños...

Felicidades a 100% de cuento por una magnífica iniciativa ;)

Final de liga

Anda el blog un poco de capa caída últimamente, pocas publicaciones y muy de allá para cuando, el otro día hasta me lo decían en casa... Pero prometo que en breve vamos a retomar el ritmo habitual de publicaciones, reseñas de libros y alguna que otra cosa más...

Esta semana escribo en el Más. Un artículo que habla de la actualidad política y no política, que mezcla temas pero que habla de lo mismo. Se titula Final de liga.

Este fin de semana se lo juegan todo, hay que ganar o ganar, tiene que quedar bien claro quién es el que manda, quien tiene el poder. Se han cruzado por las redes sociales mensajes de todo tipo, unas veces, pocas, con ironía, otras, las más, descalificando e incluso insultando al rival, insinuaciones de dudoso gusto que unas veces vienen desde los capitanes y otras desde algún subalterno.

Fin de semana crucial para el Partido Socialista inmerso en un proceso de primarias que no se sabe muy bien si está sirviendo para elegir a un nuevo secretario general o más bien para intentar solucionar las cuitas internas que como las meigas, haberlas, haylas.

No pintan bien las cosas en la casa socialista, la sensación, desde fuera y desde dentro, es que el partido anda en franca descomposición y nada de lo que suceda el domingo tiene visos de mejorar la situación, más bien todo lo contrario. Dudo, aunque no descarto, que tras las elecciones del domingo esto vaya a terminar en un proceso de escisión que finalmente desemboque en algo no muy diferente a lo que está sucediendo con otros partidos socialistas europeos, caso del griego o más recientemente el francés. El tiempo lo dirá.

Aún así lo peor es que uno piensa que este fin de semana los socialistas van a poder elegir entre tres candidatos a cada cual peor, toca elegir entre malo/a, malísimo/a y (permítanme la licencia) malibérrimo/a.

Pedro es un perdedor nato, segundón y dando gracias, tienen razón cuando dicen que no tiene sentido elegir a alguien que solo ha demostrado ser capaz de perder contra un PP en horas bajas acosado por la inmundicia y la corrupción que aflora en cuanto se escarba un poquito.
Susana es la indecisión personificada, el Mariano Rajoy del socialismo, llevamos escuchando que iba a dar el salto a la política nacional desde hace años, pero nunca veía el momento oportuno, no estaba dispuesta a perder y cuando parecía que era imposible perder, con todo el aparato detrás resulta que no las tiene todas consigo.
Patxi, el pobre Patxi, es el convidado de piedra, fue el primero en saltar a la palestra pero ni convence ni ilusiona… Apenas cuenta en las apuestas y su discurso no cala ni en los medios ni en los propios socialistas.

Así que nada, este domingo todos estaremos muy pendientes de lo que suceda porque hay mucho en juego, y es que no se olviden que este domingo el Madrid y el Barça se juegan la liga. A uno, que es del Real Betis Balompié, esto le da casi lo mismo, y de lo del Psoe ya, ni les cuento.

Descubriendo nuevos alumnos (I)...

No sabía si iba a escribir de ello o no, pero creo que al final no me va a quedar otro remedio, total Laura ya se ha adelantado...

Empiezo por el principio, Laura ha pasado unos meses en la cárcel, concretamente trabajando, para especificar y que no queden dudas. Ha estado impartiendo un curso y llega ya a su parte final, ahora fuera del talego, y en esta última parte me invitó a echar una mano. La idea me pareció interesante, no dejaba de ser un reto y aunque uno cada año sigue conociendo alumnos que nada tienen que ver con los que ha tenido hasta entonces, esto, no cabe duda, iba a ser un poco diferente.

Es imposible negar que uno parte con una cierta predisposición, no diré que negativa, pero digamos que no deja de haber un cierto reparo, dar un curso, una charla, simplemente hablar con un grupito de gente que acaba de salir de la cárcel es diferente a hacerlo con gente que inicialmente podemos considerar normal. Quede perfectamente claro que igual de normales son los que están allá dentro y los que estamos aquí fuera, supongo que han sido las circunstancias de la vida las que han marcado esas diferencias.

No sabía muy bien lo que me iba a encontrar, empezando por el nivel que cada alumno puede tener acerca de los temas a tratar, la cercanía al mundo de las nuevas tecnologías en unas personas que como dijo Laura al principio venían de un periodo de vacaciones, y es que contra los bulos extendidos mis alumnos no han tenido en la cárcel acceso al mundo de las nuevas tecnologías, ni siquiera los medios materiales de que íbamos a disponer aunque esto no iba a ser óbice ni impedimento para llevar adelante el curso.

Desde el principio les dije que estaba allí para contarles cosas pero también para escucharles, mi idea de lo que yo quería contar no tenía por qué coincidir con lo que ellos querían escuchar y como no soy de llevar un guión preparado al que uno se tenga que ceñir sí o sí, y menos aún en casos como este, fui dejando que las cosas fluyeran de forma natural. Inicialmente puede parecer que ir improvisando sobre la marcha es más complicado pero por una parte te quitas rigidez, consigues captar mejor la atención y finalmente resulta mucho más productivo. De esta manera ninguna clase es igual, es diferente para cada alumno o grupo de alumnos, puede fallar pero siempre se hace con la mejor de las intenciones.

Nada más empezar uno se olvida de prejuicios y se da cuenta de que está ante un grupo de personas cada una de su padre y de su madre, de diferentes edades, con diferentes expectativas por delante, dispuestas a escuchar en su mayoría, no todas, en algún caso intentando mantener la distancia desde el principio, poniendo alguna barrera y alguna traba, pero a la vez te das cuenta de que es relativamente fácil llevártelas a donde uno pretende. Basta dejarles hablar, hacer que se sientan escuchadas (siempre resulta interesante escuchar una visión a la que no solemos estar acostumbrados) y ver por donde va saliendo cada uno de ellos. Me llamó la atención ver como alguna de ellas pretendía impresionar con sus hazañas, y ahí descubres lo verdes que aún están para conseguir un reinserción plena. Ese impresionar puede valer dentro, fuera no vale para nada, todo lo contrario.

Seguramente cuando uno piensa en la cárcel, en los presos más concretamente, se imagina gente curtida, con iniciativa, dispuestos a cualquier cosa..., y no, no digo que no dispongan de esas cualidades, es muy posible incluso que las tengan pero me temo que las han perdido o las tienen escondidas. Hablo en general porque es un grupo bastante heterogéneo pero vi falta de autoestima, miedo a dar pasos en la buena dirección, creo que se han acostumbrado tanto a que les digan lo que hay que hacer y cómo hay que hacerlo que han perdido parte de su personalidad. Supongo que resulta duro decirlo pero, aunque no me cabe duda de que habrán mejorado mucho durante el curso, que les habrá servido de mucho, uno tiene la amarga sensación de que la reinserción real y plena está todavía lejos. Cierto es que lo tienen en su mano, no podrán decir que no les han dado una nueva oportunidad, de ellas es de quién depende todo, si algo hemos hecho para que puedan conseguirlo y salir del oscuro pozo bienvenido sea.

El próximo lunes llega la segunda parte, en principio con la idea de darle un contenido más práctico, concretamente con las sugerencias que ellos mismos lanzaron, pero ya veremos cómo se desarrolla todo y aquí estaremos para contarlo ;)

Noticias y noticias

Este es uno de los titulares que aparece hoy en la portada de Elmundo.es.

He escuchado muchas veces eso de que si un perro muerde a una persona no es noticia, pero si una persona muerde a un perro eso sí que lo es. Aquí ando dando vueltas al perro y a la persona pero no termino de verlo.

La prensa -y fundamentalmente esa que se dice seria- luego se lleva las manos a la cabeza porque van perdiendo su poder de influencia pero a mí me parece que se lo están ganando con creces. No hay mucho más que decir...

[Libros] Matar al heredero, Carlos Laredo

Los libros de Carlos Laredo con el cabo Holmes como protagonista se han convertido en algo tradicional ya en este blog. En el blog están reseñados los cuatro anteriores (1, 2, 3 y 4) y hoy, justo coincidiendo con la publicación  del último de la saga, dejo aquí su reseña, no sin antes agradecer a la editorial Sinerrata que me hiciera llegar un ejemplar de Matar al heredero antes incluso de la propia publicación del libro.

Título: Matar al heredero.
Autor: Carlos Laredo.
ISBN: 9788415521310 ePub 9788415521327 mobi 9788415521334 IBD
Editorial: Sinerrata.
Fecha de publicación: Abril 2017
Sinopsis: El cabo José Souto, Holmes, lleva casi un año sin conseguir resolver el caso de asesinato de un joven aristócrata local, que ha conmocionado a la localidad de Corcubión, en la Costa de la Muerte gallega. La llegada de su amigo Julio César Santos, el caprichoso y millonario detective madrileño, y su oferta de ayuda estimulan su amor propio y lo obligan a replantearse la investigación.
Entre ambos, cada uno con sus particulares métodos, descubrirán que hasta las mejores familias tienen sus secretos y sombras, y cuán poderosos y dañinos pueden ser el amor, el odio y la venganza, aunque no siempre de la forma más evidente.
Una vez más, el cabo Holmes tendrá que hacer acopio de todas sus capacidades deductivas para, con algo de ayuda de su amigo Santos y sus no tan ortodoxos procedimientos, en los que casi siempre interviene alguna mujer, poner fin a una investigación de complejas conexiones e inesperado desenlace.

Opinión personal: Al poco de comenzar el libro me embargó una cierta sensación de que el autor, Carlos Laredo, estaba cansado, los diálogos no parecían fluir igual que en los libros anteriores de la saga, supongo que los veía más artificiosos, menos reales, les faltaba algo..., o eso o bien mi nivel de exigencia con el autor y con la saga de Holmes ha aumentado, que también puede ser. Afortunadamente el libro va de menos a más y en cuanto Laredo vuelve a sus derroteros habituales, las descripciones de su querida tierra gallega, las elucubraciones de Holmes, la chispa de Santos... la historia va subiendo enteros.

Holmes sigue sin ascender, es cierto que ahora ocupa el lugar dejado por el sargento Villarino en el puesto de Corcubión, su despacho ya no es un cuchitril y hay más espacio así que supongo que el ascenso tiene que estar al caer ;) Para la próxima, seguro.

Los libros de Laredo no dejan indiferente, en la historia, como en todas las anteriores, hay una fuerte dosis de crítica social, y en este caso se llevan la palma los poderosos que parece que siempre están por encima del bien y del mal. Esta historia no es ajena a esa leyenda, aún así uno de los aspectos que me gustan de la historia es como el autor consigue que el cabo Holmes no juzgue lo que está sucediendo, lo que está investigando, simplemente cumple con su trabajo, y es aquí donde la complementaridad con su amigo Julio César Santos toma un papel fundamental, son la noche y el día, Holmes y Watson, Bevilacqua y Chamorro..., o Quijote y Sancho.

Un libro con el que los aficionados a la novela negra disfrutarán sin ninguna duda, porque Laredo tiene la virtud de enganchar al lector. No veremos el libro en los principales escaparates de las grandes cadenas, pero seguro que quien lo lea disfrutará y ese es el mayor placer que podemos tener los lectores.